El Racing lucha contra todo y todos, pero cae en los cuartos de final

El Racing CP Valverdeño se despidió de la Copa de Extremadura en los cuartos de final tras caer en la tanda de penaltis ante el UP Plasencia, líder del grupo cacereño de la Liga Alma, en un encuentro marcado por la lluvia, la igualdad y la polémica arbitral. Pese a la eliminación, el conjunto que dirige Alejandro Durán firmó uno de sus mejores partidos de la temporada.

El choque estuvo condicionado desde el inicio por el mal estado del terreno de juego, muy afectado por las lluvias, lo que dificultó la circulación del balón. La primera parte fue muy trabada, con mucho juego directo y apenas ocasiones claras para ninguno de los dos equipos.

Nada más comenzar la segunda mitad llegó el primer tanto local, de Toni tras aprovechar un rechace para enviar el balón al fondo de la red. Diez minutos después se produjo la primera polémica de la noche en contra del Racing: Onouha encaró a Guille y conectó un potente disparo que golpeó, supuestamente, en la cruceta y botó sobre el césped antes de acabar en las manos del guardameta local que continuó jugando. Pocos segundos después el colegiado, a instancias de su asistente, decretó gol, ante el asombro de jugadores locales y visitantes. Los valverdeños reclamaron que el balón no había entrado, pero nada pudieron hacer ante la decisión arbitral.

Pese al golpe anímico, el Racing no se vino abajo y comenzó a generar peligro, con Álex Romero y Juanmi muy activos en ataque. El premio llegó a falta de un cuarto de hora para el final, cuando Mati firmó el 2 – 1 tras rematar un centro desde la izquierda.

Cuando los locales saboreaban la victoria, en el minuto 87 una internada por la izquierda terminó con un centro al corazón del área que Belkacem remató para establecer el empate. Acto seguido llegó la segunda acción protestada por el Racing, la expulsión por doble amarilla de Godoy, que dejó a su equipo con un jugador menos durante toda la prórroga.

A pesar de ello, los valverdeños tiraron de casta y orgullo para resistir bajo una intensa lluvia ante un rival que apenas generó peligro. Tras los 30 minutos extra, el pase se decidió en la tanda de penaltis, donde el Racing no estuvo acertado. Fallaron Mati, Cito y Botello. Solo Juanmi consiguió marcar. Por parte visitante anotaron Platero, Alfonso y Onouha, mientras que Guille llegó a detener un penalti a Sergio, aunque sin premio final.

Durante el partido también hubo un gran susto para todos cuando el jugador visitante David calló golpeándose la cabeza contra la pared. Tras ser atendido en el terreno de juego, el plasentino tuvo que dirigirse al centro de salud para una valoración médica.

El Racing dice adiós a la Copa tras un partido en el que mereció más, y ya pone el foco en la competición liguera, que se reanudará tras el parón navideño.

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