Vaya forma de celebrar el 50º aniversario, CAMPEONES DE LIGA

El Racing Valverdeño se ha proclamado campeón del grupo segundo de la Primera División Extremeña, después de vencer en Puebla de la Calzada por 1 – 2 y aprovechar el tropiezo del Gévora en Cheles, que desperdició un 0 – 2 en a favor para acabar cediendo un empate.

Segundo campeonato para los valverdeños que repiten triunfo como ya lo hicieran en marzo del 2012 cuando se proclamaron campeones de Regional Preferente por primera vez en su historia en Aceuchal. Antes de aquel campeonato, también fueron campeones de Primera Regional confirmando las tres ocasiones en las que han ganado la liga.

Gran alegría para la familia racinguista en esta temporada que se está celebrando el 50º aniversario del club, que no ha tenido mejor regalo que este importante triunfo.

Los de Alfredo Soriano llegaron a esta última jornada sabiendo que sus posibilidades pasaban por una carambola muy complicada, tenían que mejorar el resultado que consiguiese el Gévora en Cheles, es decir, si estos empataban, los valverdeños tenían que ganar al Puebla de la Calzada, que se jugaba entrar en playoff; y si el Gévora perdía, les valía con un empate. En caso de victoria de los gevorenses, no habría nada que hacer.

En el partido había mucho en juego y los locales no lo pusieron nada fácil. Es más, fueron los primeros en avisar de que iban a por los tres puntos tras rematar al palo en los primeros minutos de juego tras una gran internada por banda derecha. Pero los valverdeños no se sorprendieron y siguieron en su línea, bien plantados, muy juntos cerrando espacios y aprovechando la velocidad y calidad de los de arriba. La primera ocasión visitante fuer para Manu al adelantarse al portero y cruzar demasiado el balón.

Pasados los 25 minutos de juego y con mucha igualdad sobre el césped, los racinguistas reclamaron un penalti a Borja Romero, que tuvo que ser atendido, pero el colegiado no vio nada punible. El delantero valverdeño lo intentó más tarde con un fuerte disparo desde la frontal que despejó el portero local.

Durante todo el encuentro las conexiones con Cheles fueron constantes para saber el resultado del partido que, hasta el descanso, era el mismo que el de los valverdeño y daba el campeonato a los de Gévora.

En la segunda mitad el Puebla volvió a avisar con otra rápida jugada cuyo disparo acabó en el lateral de la red. Pero apenas unos minutos después, fue Manu el que abrió el marcador tras una recuperación que él mismo finalizó con un fuerte disparo por bajo.

Con estos resultados, los valverdeños eran campeones de liga. Los minutos se iban consumiendo y pasada la hora de juego llegaron las peores noticias. El Gévora se adelantó en Cheles y el Puebla empató el encuentro tras un penalti que transformó Nevado, aunque Alonso estuvo muy cerca de pararlo. Poco después, otro gol del Gévora, el segundo de Joaqui Flores, hacía presagiar lo peor.

Los valverdeños siguieron a lo suyo y a falta de 15 minutos para el final, Borja Romero cazó un balón en la media luna y lo mandó a la escuadra, logrando un golazo que daba ventaja a los suyos. La celebración fue algo descafeinada porque muchos ya conocía el resultado momentáneo que había en Cheles, 0 a 2.

El Puebla intentó reaccionar, este resultado lo echaba del playoff de ascenso a Tercera División, y apretó a los racinguistas que se defendieron como pudieron y disputaron de varias contras con las cerrar el encuentro, pero ninguna de ellas entró.

Todo cambió en los últimos diez minutos de juego. Un mensaje de WhatsApp avisaba que el Cheles había recortado distancias y en Puebla, este gol fue muy celebrado por los valverdeños. Pero solo un minuto después, otro mensaje certificaba el empate del Cheles y estos resultados proclamaban a los valverdeños campeones. Alegría de los aficionados racinguistas que comenzaron a llamar a conocidos que estaban viendo el partido en Cheles para intentar enterarse del resultado final.

En Puebla poco más se vio. Tras el pitido final, los valverdeños se felicitaron y consolaron a los locales que se quedaron fuera de la promoción por ascender, mientras los aficionados valverdeños se informaban de todo lo que ocurría en Cheles.

Pasados unos minutos llegó la mejor de las noticias posibles, el final del partido con empate entre Cheles y Gévora y los valverdeños, jugadores, cuerpo técnico y aficionados estallaron de la alegría al conocer que ya eran campeones de liga. Todos lo celebraron por todo lo alto, junto a esa afición que nunca los ha dejado solo y que los han apoyado en esta complicada temporada que finalizan de la mejor forma posible, como campeones de liga.

Los locales tuvieron un bonito gesto hacía los valverdeños cuando se dirigían a vestuarios, realizando el pasillo para felicitar a los campeones. Gran deportividad de un equipo que se quedó sin el premio de luchar por ascender, pero que el año que viene jugará la Copa del Rey y que seguro volverá a luchar por los mismos objetivos.

Pasadas las ocho y media de la tarde llegaron a Valverde de Leganés, a la zona centro del pueblo donde muchos aficionados esperaban para felicitar a los campeones que lo celebraron hasta bien entrada la noche.

Ahora toca comenzar a trabajar de cara a la próxima fase de ascenso, para intentar cerrar esta temporada del cincuentenario con el doble premio, el campeonato de liga y el ascenso a Tercera División.

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