La feria acogió una clase práctica para cuatro alumnos de la Escuela de Tauromaquia de la Diputación de Badajoz

Este domingo, dentro de la programación de las Ferias y Fiestas de Agosto en Valverde de Leganés, se disfrutó de otro festejo taurino al que asistió un buen número de público local y de pueblos limítrofes, de edades variadas, que llenaron algo más de media plaza. Fue una clase práctica taurina dirigida a cuatro alumnos de la Escuela de Tauromaquia de la Diputación de Badajoz, en la que se lidiaron cuatro novillos de la ganadería de Talavante.

El vecino valverdeño, Ángel Moreno Álvez, ha facilitado a HOY Valverde de Leganés la siguiente información sobre el festejo.

«Arrancó el pasillo amenizado por la Asociación Cultural Banda de Música de Valverde de Leganés. Los cuatro novilleros, acompañados por las cuadrillas y monosabios, pidieron permiso al presidente, el concejal de Cultura del ayuntamiento, Cristo González, quien concedió gustosamente para dar comienzo el espectáculo.

En primer lugar, fue el turno de Sergio Sánchez, que recibió a un bonito novillo negro meano abrochadito de encornadura, al cual intentó sacar lo mejor de él ya que su masedumbre no permitió expresar al novillero lo que él hubiera deseado. Aún así, pusimos ver buenas tandas que de no ser por la espada hubiera terminado en triunfo. Ovación.

Seguidamente, Manuel León, que con solo hacer el paseíllo se veía que venía a por todas. Recibió a un bravo novillo negro zahino al cual le hizo una impresionante faena llena de temple, verdad y pureza, donde toreó por abajo despacio y pases largos que llegaban de pitón a rabo. La espada le privó del rabo. Dos orejas que se llevó en la espuerta para casa, clamorosa vuelta al ruedo y palmas en el arrastre de su antagonista de la ganadería de Talavante.

En tercer lugar, saltó al ruedo un bonito jabonero sucio, también de la ganadería de Talavante, Pepe Burdiel, a quien le costó un poco cogerle el sitio al novillo ya que, por su bravura, tenía una codicia impresionante, pero una vez templado nos sorprendió el acople de torero y toro, porque cuando hay bravura, hay emoción. Pena que la entera, pero tendida estocada del novillero, no fuese suficiente para que el novillo doblase, lo que le privó de los triunfos tras varios pinchazos al descabellar. Una oreja y palmas en el arrastre para el novillo.

Como es de costumbre, cuando saltó al ruedo el último novillo podíamos escuchar el pasodoble 'Valverde de Leganés'. Julio Méndez recibió con una larga cambiada de rodillas al negro listón para después demostrar al público lo que podía hacer, dejando boquiabierto a los tendidos ya que no se quedó nada guardado y con su buen hacer, pareciendo torero consagrado y figura, pudo sacarle todo el partido al bravo novillo. Después de una certera estocada se le dio la vuelta al ruedo arrastrado por un bonito tiro de mulillas. Dos orejas y rabo para Julio Méndez, que dio la vuelta al ruedo junto al mayoral.

Así finalizaron nuestras fiestas taurinas en Valverde de Leganés. Agradecer a las autoridades competentes su trabajo por hacer estos festejos realidad en la localidad. También, agradecer la colaboración de la Banda de Música durante toda la feria, en especial, en los festejos taurinos, que no serían lo mismo sin su participación».